El actor protagonista de la franquicia de Misión Imposible iba a abandonar su protagonismo al final de la película para dejar paso a Jeremy Renner como nuevo líder de la saga.
Parece que la historia podía haber sido muy distinta a cómo la recordamos. Desde hace mucho tiempo se rumorea que Tom Cruise podía haber abandonado la franquicia Misión Imposible tras la cuarta entrega, Protocolo Fantasma, pero finalmente no sucedió, y nunca llegó a confirmarse… hasta la fecha. Al parecer la situación entre Paramount y Cruise se había deteriorado debido a varias polémicas públicas (el momento del sofá de Oprah Winfrey, por ejemplo…) y pensaron en cambiar de dirección con la franquicia. Obviamente Paramount necesitaba a Cruise una última vez, y las cosas se arreglaron para Protocolo Fantasma, con la intención de que inicialmente Jeremy Renner fuese el sustituto.
Renner llegó a insinuarlo en comentarios para MTV, pero finalmente se retractó de sus palabras. Ahora el director de fotografía Robert Elswit, quien trabajó en Protocola Fantasma y Nación Secreta, lo ha confirmado todo en una entrevista con Collider. La idea era que Cruise dejase la acción y que Ethan Hunt, al final de la película, se convirtiese en el Secretario y líder de la agencia, dejando a otro actor (Elswit no sabe si era Renner aunque lo imagina. Pero habla de que pudo ser otro actor) al frente de las misiones imposibles… Todo eso cambió con la llegada de Christopher McQuarrie, quien hizo la reescritura del guión durante rodaje. Tanto Cruise como McQuarrie como Paramount vieron la locura en todo aquello y el hecho de que no funcionaba, y McQuarrie junto a Cruise se encargaron de arreglarlo, rodando nuevamente el principio y cambiando líneas de diálogo para hacer que el final fuese el que conocemos y con Cruise liderando aún la franquicia, que ha alcanzado su máximo esplendor con Fallout. Por cierto, Elswit cuenta esto porque dice que, aunque nadie quiere hablar del tema, lo que él diga no le interesa a nadie…
Jesus Usero
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